El PRONIED, DRELM y UGEL N° 02 entregaron cinco aulas prefabricadas e implementaron los servicios educativos para el funcionamiento del PRONOEI Huellitas del Futuro, ubicado en el AA.HH. Villa Isolina del distrito de San Martín de Porres.

Un grupo de madres de familia del asentamiento humano Villa Isolina, del distrito limeño de San Martín de Porres, lograron crear este año un local PRONOEI con aulas prefabricadas que brinda educación inicial a cerca de 50 niños de 3 a 5 años de edad.

El AA.HH. Villa Isolina está ubicado en las laderas de un cerro ubicado en la margen del río Chillón, donde no hay acceso al agua potable. Antes las madres cruzaban el río llevando a sus hijos a escuelas alejadas, hasta que se organizaron para tener en su zona un local del Programa No Escolarizado de Educación Inicial (PRONOEI).

Así, las madres habilitaron un local comunal, y el 1 de enero de 2016 lo entregaron en cesión de uso al Ministerio de Educación (Minedu), el cual a través del Programa Nacional de Infraestructura Educativa (PRONIED) instaló allí cinco aulas prefabricadas que vienen siendo utilizadas por los niños desde abril.

Por su parte, la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM) y la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Nº 02 facilitaron los servicios de las profesoras coordinadoras que brindan una educación de calidad a los estudiantes.

Impacto social

“Ahora con las aulas prefabricadas los niños se sienten abrigados, cómodos y seguros. El piso les permite caminar y jugar con tranquilidad, además las aulas tienen canaletas que evitan el ingreso de las lluvias, protegiéndolos del frío”, expresó Nathaly Mantari, presidenta de la Asociación de Padres de Familia (Apafa) del PRONOEI Huellitas del Futuro.

Nathaly Mantari recordó cómo antes ese terreno servía como depósito de desmonte y basura, y gracias al apoyo de las madres de la comunidad y del comedor “Las Triunfadoras” del AA.HH. Villa Isolina gestionaron la creación del PRONOEI Huellitas del Futuro.

Cabe anotar que los locales del PRONOEI surgen para atender a los niños que habitan en zonas rurales y urbano-marginales donde es difícil el acceso a un centro educativo inicial.