“Seré alguien en la vida”

Claudia Shapiama llegó a Lima a los 17 años desde San Martín, hace apenas una semana logró lo que siempre había soñado; estudiar y obtener su título. A casi diez años de llegar a la capital, recuerda con mucha claridad que trabajó en una juguería, pelando frutas, limpiando los baños y atendiendo a clientes inconformes con su pedido.

Ese trabajo le permitió mantenerse a sí misma y enviarle dinero  a su abuela que la crió, pero cada año que pasaba sentía la necesidad de estudiar, soñaba con tener su propia marca de ropa y fue con esa ilusión que una amiga le recomendó el CETPRO “Los Libertadores”. Claudia no lo pensó dos veces y decidió estudiar la carrera técnica de textil y confección.

“Para obtener mi título, pasé un examen que consistió en confeccionar un polo y me dijeron que pasé la prueba, me sentí muy feliz y orgullosa porque seré alguien en la vida.  Después de mi graduación llamé a mi familia,  me felicitaron y celebré porque jamás en la vida pensé en estudiar y lograr un título”,  narró Claudia de 28 años de edad.

Este es el testimonio de uno de los 177 estudiantes de la jurisdicción de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) N° 02, quienes han logrado culminar el ciclo básico (1,000 horas) o el ciclo medio (2,000 horas) en un Centro de Educación Técnico Productiva (CETPRO) y que recibieron sus títulos como auxiliares técnicos y técnicos.

Otra experiencia de éxito es el de Agripina Baldeón, también egresada de la familia profesional de “Textil y Confección” y que logró la apertura de su taller de confección y costura. Hoy en día se desempeña como la responsable de vestuario del canal de televisión Bethel, luego de egresar del CETPRO Perú, ubicado en el distrito de San Martín de Porres.

Un ejemplo para su hija

Para Carmen Rosa Cabello, la cercanía del CETPRO a su domicilio fue muy importante para poder compartir el trabajo del hogar con sus estudios, con la titulación no solo ha logrado inaugurar un salón de belleza, sino convertirse en un referente para su hija:

“Cuando llegué al CETPRO “Los Libertadores”, me agradó su ambiente y su nivel. Después de un año de estudio me siento satisfecha por haber consolidado una primera etapa. Ya puedo generar mis propios ingresos y eso contribuye a la calidad de vida de mi familia”, expresó Carmen

Mientras continúa en su clase de masaje, recuerda que su hija, de 18 años, la acompañó a la graduación y le comentó con mucha emoción que ella era su referente para terminar su carrera.

Nos comenta también que con sus estudios, ha logrado inaugurar un salón de belleza, donde se ofrecen tratamientos capilares, maquillaje para novias y mucho más.

Experiencias como las de Claudia, Agripina o Carmen hacen que la Educación Técnico Productiva se convierta en una alternativa para estudiantes, jóvenes y adultos que necesitan adquirir habilidades laborales competitivas y que quieren contar con certificación oficial a nombre del Ministerio de Educación para insertarse en el mercado laboral.

Beneficios de la Educación Técnico Productiva

  • Certificados modulares, es decir, una certificación por cada módulo concluido para luego poder acceder al título técnico.
  • Los titulados han adquirido y fortalecido sus capacidades, de acuerdo a sus propias expectativas y propósitos y a la demanda del sector productivo.
  • Horarios flexibles, en turnos de la mañana, tarde y noche, con clases todos los días, incluidos los sábados y domingos.
  • Además, los centros técnicos ofrecen estudios a bajo costo a mayores de 14 años y los interesados pueden iniciar sus estudios en cualquier momento.
  • Los CETPRO forman técnicos en especialidades como: cosmetología, cocina, metalmecánica, operación de computadores, confección industrial, entre otras. Actualmente se cuenta con 423 CETPRO en Lima que responden a la demanda de educación técnica en el Perú y la Dirección de Educación de Lima Metropolitana (DRELM) se encarga de 121 CETPRO públicos y por convenio.